Consejos para recitar poemas

1. Conoce tu poema.

Lo primero que debes hacer es leer el poema una y otra vez y entenderlo bien. Es importante que sepas qué quiere transmitir el autor del poema al escribirlo, qué sentimientos expresa con sus palabras, qué emociones evoca...

2. Apréndetelo.

Escoge un poema de la antología que puedas memorizar: individualmente, por parejas; completos, por estrofas.

3. Ensáyalo.

Hay que vocalizar bien y usar las manos para acompañar lo que se quiere decir. Si se usan objetos (libro, flor, sombrero, dibujos...) habrá que ensayar también los movimientos con ellos. Se trata de que el recital resulte más entretenido, visual, divertido...

4. Lee o recita adecuándote al ritmo del propio poema.

Hay que hacer uso de las pausas, pueden ser muy efectivas para llamar la atención del público. Si se quiere llamar la atención sobre un verso en concreto, cállate antes de leerlo y mira fijamente a los ojos de tu público. Se fijarán mucho más en lo que dices. Habrá versos en los que convendrá aumentar el ritmo de tu recitación, y habrá rimas en las que resulte mejor hacerlas más lentamente.

5. Cuida las rimas.

Gran parte de la gracia de un poema reside en sus rimas. Recitar es leer con un determinado ritmo y entonación un poema, pero el ritmo y la entonación ya vienen marcados por el propio texto y la rima ayuda a encontrarlos. Apréndetelas bien y pronúncialas con gracia, su efecto será mucho mayor. Sólo si conoces bien tu poema sabrás sacar partido a sus rimas.

6. Interpreta.

Al recitar un poema estamos inevitablemente interpretándolo. Aunque el propio poema tenga voz y ritmo, y la voz sea el sentimiento o pensamiento de un poeta, cuando lo leemos o recitamos lo hacemos nuestro, le damos un toque divertido, triste, espontáneo, solemne... Si

lo hacemos nuestro se notará y será una interpretación más auténtica.